Un correcto riego en el almendro es un elemento esencial para su pleno desarrollo, producción y rentabilidad.

En los primeros años, un riego que permita al almendro mantener una humedad constante y abundante permitirá que raíz y tronco alcancen el tamaño deseado. El tamaño de la copa del almendro es un fiel reflejo del tamaño de las raíces, así que, un gran tamaño en raíz supone un gran tamaño de copa y una gran producción de almendras.

Junto con el tamaño de la copa otro aspecto directamente relacionado con la productividad del almendro es el riego y es decisivo en épocas como la floración, el cuajado y crecimiento de las almendras.

A mayor volumen de agua aplicada durante el cuajado mayor crecimiento de las almendras y mayor producción. Un riego 2 o 3 semanas antes de la recolección ayuda a que la corteza de la almendra se desprenda más fácilmente.

El riego postcosecha también influye en la producción del año siguiente, ya que le permite al árbol almacenar nutrientes hasta el siguiente ciclo.

En Irconsa llevamos años instalando sistemas de riego por goteo en Almendros, pistachos, olivos, etc.

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